28 de agosto de 2007

Vuelta al tajo

Informar que tras seis días sin hacer deporte, ayer volví a las andadas con una sesión de bici de algo más de tres cuartos de hora. En total unos 16 Km por el terreno rompepiernas del campus de Murcia. Esta tarde a nadar, y así el resto de la semana combinando piscina y bici, que el sábado saldré a correr un rato y a probar el pie.

Aprovecho para anunciar que correré el 9 de septiembre la Media Maratón Ciudad de Lorca como preparación final para Berlín si el pie me lo permite.

23 de agosto de 2007

Esguince de tobillo

A punto de no correr en Berlín el 30 de Septiembre. El martes haciendo un entrenamiento rápido me torcí el tobillo. Tres horas después estaba saliendo de urgencias en silla de ruedas con una férula, un esguince de grado 2 y el pronóstico de una semana con el pie inmovilizado y luego mínimo dos de recuperación. El sueño se desvanecía, pues en este momento un parón así es tirar por la borda el entrenamiento realizado hasta ahora.

Afortunadamente ayer miércoles visité un fisioterapeuta que me recomendó mi amiga Marta. Revisó mis placas y tras quitarme la jodida férula me revisó el tobillo. El pie no está hinchado, no hay hematoma y la movilidad no es mala. Diagnóstico: Tengo un esguince, pero mucho menos grave de lo que me dijeron, así que me ha puesto un vendaje funcional. De ese modo puedo hacer vida normal y salí de la consulta ¡¡¡ andando normalmente !!!. Me quedan cuatro días con la venda a partir de los cuales podré empezar a montar en bici, nadar y realizar ejercicios de fuerza para el tobillo. En diez días estaré corriendo otra vez. Es un problema, pero después de haberlo visto todo negro, es una bendición saber que estaré corriendo normalmente en diez días y que aún podré cumplir con los plazos de entrenamientos.

20 de agosto de 2007

La porra para la Maratón de Berlín

Como ya hice hace un año con la maratón de Nueva York, este año voy a hacer otra porra para la maratón de Berlín. Es muy sencillo, participar es gratis y el ganador se llevará algún regalo conmemorativo del evento que yo mismo compraré el fin de semana de la carrera. CUALQUIERA PUEDE PARTICIPAR.

Reglas:

1. Se participa dando un pronóstico del tiempo que haré. Ganará el que más se acerque, ya sea por arriba o por abajo a mi TIEMPO NETO registrado por la página web oficinal de la Maratón. Me explico, te toman dos tiempos, el oficial y el neto. El oficial empieza a contar desde que se da el pistoletazo de salida hasta que cruzas la meta. El neto empieza a contar cuando pasas por la línea de salid de Berlín, es decir, es el tiempo que tarde en completar los 42 kilómetros y 195 metros. Como seremos unos 40.000 corredores y primero salen los profesionales, va a pasar un rato desde que se de el pistoletazo, hasta que yo empieze la carrera, por eso en la porra el válido es el tiempo neto.
2. Dado que no hay dinero de por medio, sólo vale un tiempo por persona.
3. No se pueden repetir tiempos ni dar tiempos en una franja de 10 segundos con respecto a otro tiempo pronosticado. Ejemplo: Si alguien pone 3h10'00", no puede haber otro pronóstico entre 3h09'50" y 3h10'10".
4. Si abandono, perdemos todos, porque voy a estar de muy mala hostia para andar dando recuerdos de la carrera, así que no vale pronosticar que no acabaré la carrera.
5. El jueves 28 de septiembre, a las 14h (hora española) se cierra el plazo.

Pistas:

1. El objetivo que me he marcado es acabar por debajo de 3h10', por lo tanto puede ser una buena referencia.
2. El año pasado corrí la Maratón de Nueva York en 3h22'41".
3. Cuando corro 10 Km a tope tardo entre 41 y 43 minutos, dependiendo del día.
4. Lo voy a dar todo y las apuestas no influirán en mi rendimiento, simplemente intentaré acabar lo mejor posible en el menor tiempo posible.

Cómo participar:

1. Dejando un comentario con tu pronóstico en este blog.
2. Enviandome un email a cpayanalonso@yahoo.es con tu pronóstico.
3. Por teléfono, por messenger o como sea, simplemente haciéndome saber el tiempo que piensas que haré.

Vaya semanita!!!!

Menuda semana la pasada, eso sí, que la hemos cerrado con algo más de 66 Km de entrenamiento. Esto de las vacaciones a veces, cuando te preparas para una maratón te hace ir mucho más estresado. Me explico:

El lunes no pude correr porque venía de viaje de la playa y llegué a Murcia a las nueve y media de la noche sin ganas de hacer ese entreno suave de recuperación.

El martes me iba de viaje a Cañada de la Cruz, las fiestas del pueblo de mi amigo Paco Dimas. Salíamos a las seis y media así que tuve que hacer un entrenamiento fuerte a las 4 y media de la tarde en Murcia, a casi 40 grados con mucha humedad.... casi me da algo.

El miércoles volvíamos a Murcia desde Cañada de la Cruz, si bien parando por la tarde y a cenar en Caravaca de la Cruz. Allí, por los caminos del pueblo y con la ayuda de Juan, el tío de mi amigo Paco Dimas, conseguí hacer 45 minutos de fartlek acompañado durante la primera vuelta de las dos que di a ese circuito improvisado de un coche que me indicaba el camino correcto por aquel laberinto de caminos.

El jueves por la noche tenía que estar en Madrid para cenar, así que tuve que volver a salir a correr a las 5 de la tarde, con toooooodo el calor y humedad que eso supone en Murcia. Por lo menos fue un entrenamiento suave en longitud (5 Km) y velocidad.

El viernes, como estaba en Madrid me fui al Retiro. Como no lo conozco y nunca he corrido por allí decidí correr por el borde interior del parque, si bien hay un punto que si no te lo conoces te sales, así que me perdí un poquito. Al final un par de vueltas más o menos iguales para hacer casi 45 minutos a ritmo bastante fuerte.

El sábado descanso merecido.

El domingo, de vuelta a Murcia donde llego a las 7 y media de la tarde. A las ocho estoy con las zapatillas puestas afrontando una larga y tediosa tirada de 35 Km. La semana ha sido muy larga, hay muchísima humedad, me deshidrato demasiado rápido y quizá salgo un poco deprisa, así que en el Km 30, totalmente exhausto, con dolores en las piernas, dificultad para llevar un ritmo normal de respiración y bastante deshidratado, decido parar cuando llevo recorridos 30 Km y medio.

Como bien digo, meduda semanita. Espero que la que hoy empieza sea más llevadera y no tenga que hacer tantas cábalas.

9 de agosto de 2007

Retrospecto - New York City Marathon (2 de 3)

Este Retrospecto tiene dedicación especial para Lorenzo, cuyo propósito y reto podéis conocer visitando su blog nycmarathonyalgomas.blogspot.com. Él hará su debut como maratoniano, al igual que hice yo en 2006, en la Maratón de Nueva York. Mucha suerte.

El Puente de Verrazano
Aún recuerdo con nitidez como nada más sonar el pistoletazo empezamos a subir aquel magestuoso puente. Es la subida más larga y con más pendiente de toda la carrera, pero el descanso y la adrenalina del momento hace que apenas notes que estás subiendo. Yo estaba ansioso por comer kilómetros y desde el primer momento empecé a adelantar gente por donde podía. Era muy complicado, pues éramos muchos y los ritmos eran ya desde el principio diferentes. Había corredores que se paraba a hacer fotos desde la mediana del puente y la sonrisa dominaba los rostros de casi todos los corredores que afrontábamos el reto aquel día. En algún punto del puente me dio la sensación de que hacía algo de calor y que iba a seguir subiendo la temperatura durante la carrera, así que decidí tirar mis guantes. He de decir que luego los eché de menos. Fueron dos millas en aquel puente, el famoso, el que sale cada primer domingo de noviembre en los telediarios de todo el mundo para decirnos que se está celebrando una nueva edición de la Maratón de Nueva York.

Brooklyn
Brooklyn es un clamor, lleno de gente, niños que se colocan a los lados de la calle para darte pañuelos, agua, comida, aliento y fuerza. Es un espectáculo. Mi carrera, no obstante, la marcó el paso por el cartel de la milla 3. Yo iba con un grupo que iba a llegar en 3h30 con una de esas liebres que pone la organización. Al pasar por el cartel de la tercera milla este experimentado (se notaba) maratoniano que hacía de liebre nos dijo "25 minutes guys, a little bit faster" (25 minutos chicos, un poco más deprisa). Tres millas son 4800 metros. Para hacer una maratón en 3h30 hay que ir exactamente a 5 minutos el kilómetro, por lo tanto llevábamos algo de retraso. De hecho el kilómetro 5 lo pasamos en 25:46. Yo quería correr en menos de 4 horas, pero ese día me encontraba muy fuerte y decidí jugármela desde lejos. Cambié un poco el ritmo y me empecé a alejar poco a poco de ese grupo de 3h30. Mis tiempos de paso fueron 49:16 por el km 10, 1:12:43 por el km 15, 1:36:07 por el km 20 y 1:41:04 en el paso del medio maratón. Es decir, estaba corriendo aproximadamente en 23:30 cada 5 km, y además las sensaciones al llegar el medio maratón eran buenas. Pensé que si no me desfondaba podía acabar en menos de 3 horas y media, muy por debajo de mi objetivo, y pensé incluso que podía ir un poco más rápido, pero esta vez no me la quise jugar y mantuve el ritmo. El medio maratón se encuentra en medio del puente que une Brooklyn y Queens, y por tanto es la media maratón la que nos da paso a Queens, el tercer barrio de los cinco por los que se pasa tras Staten Island (en la salida) y Brooklyn.

Queens
Queens se pasa rápido, pues son apenas 4 km los que se hacen por él. Hay menos público que Brooklyn, pero el que hay no desmerece ni disminuye la sensación de ser el gran protanista de un gran evento, pues los ánimos no cesan en ningún momento. De todas formas el cansancio empieza a ser algo más evidente, pues los 21 km que lo preceden dejan huella en las piernas. De hecho, y a pesar de pasar por el km 25 en 1:59:43 (23:36 del 20 al 25) mis zancadas ya no tenían tanta alegría como al principio. Además la amenaza del Puente de Queensboro que une Queens y Manhattan mete miedo en el cuerpo cuando sabes que se acerca el que es el momento más duro de toda la carrera para casi todos los corredores. Está justo en el km 25, y son unos dos kilómetros en los que la soledad, la dureza de la carrera y la sensación de claustrofobia hacen que parezcan muchos más... Pero eso va a tener que esperar, pues bien merece empezar el último capítulo con esa maldita parte del recorrido.

... Continuará ...

La carga de Kilómetros

61 kilómetros la semana pasada, casi 80 la anterior... Son las dos semanas que más he corrido en todo el año, y son las dos últimas. Mis piernas lo notan, mis músculos no están igual de ágiles y el cansancio del entrenamiento empieza a hacer mella.

Esta semana el lunes decidí descansar, tenía un entrenamiento de recuperación con 5 Km muy suaves, pero me quedé en casa a ver si mis piernas regeneraban. He entrenado martes y miércoles y esta mañana he pasado por el fisioterapeuta. Sesión de descarga, por primera vez en mi vida a los 30 años. Dice la fisio que me ha tratado que me va a ayudar el masaje, que voy a notar ligereza y que el cansancio acumulado va a disminuir. Pero joder, qué daño me ha hecho!!

Hoy también descanso, mañana haré unos diez kilómetros y el sábado volveré a descansar. El domingo tirada larga de más de 25 kilómetros para poner a prueba las palabras de la fisio. El entrenamiento está en su fase decisiva y sin duda, en la más dura. Eso sí, va a ser impagable si en Berlín voy bien y disfruto acabando mi segunda maratón.

2 de agosto de 2007

Retrospecto - New York City Marathon (1 de 3)

Qué menos que recordar en este blog mi debut como corredor de fondo. Qué menos que recordar mi debut en la maratón más famosa del mundo. Qué menos que recordar la satisfacción de cruzar la línea de meta en Central Park exhausto, en menos de 3 horas y media. Que menos que recordar aquel 5 de Noviembre de 2006.

Hay días que te levantas con un cosquilleo en el estómago, con los nervios y las ganas de saber que ha llegado un momento importante en tu vida, y este lo era. Llevaba casi nueve meses entrenando, desde los 20 minutos del primer día que salí a correr con las agujetas que me provocaron, hasta las 4 horas corriendo de mi última tirada larga tres semanas antes del día D. Mucho progreso, muchas horas en el calor y la humedad de Miami haciendo kilómetros y kilómetros. Todo eso tenía un objetivo y un por qué, y ese momento había llegado.

Hacía frío, aunque menos del esperado por las previsiones más pesimistas. Allí estábamos en Fort Wadsworth los casi 40.000 runners que íbamos a tomar la salida. Unos bebiendo café, otros recibiendo masajes, otros dejando pasar el tiempo, haciéndose fotos... había de todo. Yo estaba relajado, tranquilo, me encontraba bien y sabía que las cosas iban a salir bien. Estaba confiado, había apostado con mi jefe, el gran José Ruiz Arbeloa, que acabaría en menos de 4 horas, y tenía muy claro que iba a conseguirlo. Me hidraté bien las dos horas antes, y comí las cantidades adecuadas de comida. No hablé prácticamente con nadie, simplemente dejé que mi relajación poco a poco se fuera convirtiendo en emoción y esa emoción en adrenalina que me llevara más deprisa hasta la meta.

Aún recuerdo con nitidez el momento en el que me coloqué en mi "corral", el destinado a los dorsales entre el 8000 y el 8999 justo antes de andar entre los gritos de ánimo de los voluntarios hasta la zona de salida en el Puente de Verrazano. Aún recuerdo los eternos 10 minutos previos al pistoletazo. Aún recuerdo el olor a reflex y la adrenalina que soltaban a base de gritos y saltos otros corredores. Aún recuerdo todo eso y por supuesto, el BOOOOM!!!!! de la salida, el sonido que indicaba que las próximas horas las iba a vivir corriendo por las calles de Nueva York. A por todas me dije, este es tu día, y empecé a correr sin parar buscando la línea de meta.

...Continuará...