Mi mejor amigo se llama Paco Dimas. Él no lee mi blog y se interesa tan solo de forma testimonial por mi faceta de atleta. Es posible que si le pregunto si mi mejor marca en medio maraton es menos de una hora y media no sepa qué contestar. Para él el que yo corra es un motivo por el cual le dedico menos tiempo a otras cosas que supone que son más importantes. Piensa que correr condiciona demasiado mi vida. Incluso este verano cuando me hice una contractura muscular que me tuvo parado una semana me dijo que a él le venía bien que me lesionara, que así tenía más tiempo para verme. Paco Dimas es mi mejor amigo, posiblemente la persona que más ha influido (para bien) en mi vida. He aprendido de él más que de ninguna otra persona. Me ha ayudado a quitarme muchos complejos y a conocer lo mejor y lo peor de mí mismo. Es y sigue siendo fundamental en mi vida y procuro no pasar más de una semana sin verlo a él, a su mujer Luci (sencillamente encantadora) y desde que nació hace 7 meses a su pequeña Alejandra (mi lentejita). Por eso, por ser quien es y representar tanto en mi vida me duele en el alma que no llegue a comprender lo mucho que me aporta este deporte.
Querido Paco, yo empecé a correr porque tenía un sueño desde que era muy pequeño. Una vez vi en un telediario el puente de Verrazano repleto de gente en la salida del Maratón de Nueva York. No creo que tuviera ni 10 años pero esa imagen penetró en mi mente para siempre. Un sueño olvidado hasta que vi ese puente por primera vez "en directo" y decidí intentar correr el Maratón de Nueva York. Ahí, querido Paco empezó todo, porque volvió el sueño. Y el sueño se hizo realidad. Pasé 8 meses de mi vida entrenando duro, saliendo a correr por el paseo marítimo de Miami Beach mientras mis compañeros hacían botellones. Levantándome a las siete para correr antes de trabajar los dos meses que tuve el curso de inglés intensivo por las tardes. En definitiva, trabajando duro con un objetivo, con una ilusión, con una meta... con un fin que llegó cuando corrí el 5 de Noviembre de 2006 esa maratón. Fue la gran recompensa a todo el esfuerzo realizado durante tantos meses, una enseñanza impagable de cómo el sacrificio a veces te lleva a una inmensa y desmedida borrachera de felicidad. Para mí cruzar esa meta supuso una experiencia sin precedente, y supuso el principio de lo que hoy en día soy.
Amigo Paco, no voy con este mensaje a hablar de las ventajas para la salud que tiene practicar un deporte como este. Voy a centrarme en el aspecto mental y emocional. Me gustaría que entendieras que correr me aporta el chute de motivación que necesito cada día para levantarme. Me pone a prueba tanto física como mentalmente. Hace que busque en cada rincón de mí la superación de lo logrado hasta ahora. Me enseña que el trabajo duro y el sacrificio tiene recompensas. Me enseña a valorar el esfuerzo de otros que son peores atletas que yo y a admirar a aquellos a los que nunca alcanzaré. Me mantiene alejado por un momento del mundo real para poder esconderme en el mundo que diseño en mis mejores deseos, en mis mejores sueños, fuera de un día a día que no me gusta y que no consigo modelar para que me guste. Es mi vávula de escape hacia un poco de sosiego conmigo mismo, es el momento del día en el que más orgulloso me siento de mí mismo.
Amigo Paco, para mí es muy importante que entiendas todo esto. No necesito que te impliques en mi gran pasión, pero me gustaría poder compartirla contigo. Me gustaría que entendieras que es importante y que rechazándola me haces daño. Me gustaría que entendieras de una puta vez que es una parte fundamental de mi vida sin la cual no podría vivir. Supongo que tú tendrás otras razones y motivaciones que te empujan a salir cada día de la cama y a superar momentos adversos. Pues bien, yo, entre otras poquitas cosas, tengo mis carreras y necesito que mi mejor amigo, que eres tú, lo acepte. Al menos me gustaría...
Hoy voy a hacer una excepción y no voy a poner foto del viaje a Nueva York.
Me voy a la cama.
Querido Paco, yo empecé a correr porque tenía un sueño desde que era muy pequeño. Una vez vi en un telediario el puente de Verrazano repleto de gente en la salida del Maratón de Nueva York. No creo que tuviera ni 10 años pero esa imagen penetró en mi mente para siempre. Un sueño olvidado hasta que vi ese puente por primera vez "en directo" y decidí intentar correr el Maratón de Nueva York. Ahí, querido Paco empezó todo, porque volvió el sueño. Y el sueño se hizo realidad. Pasé 8 meses de mi vida entrenando duro, saliendo a correr por el paseo marítimo de Miami Beach mientras mis compañeros hacían botellones. Levantándome a las siete para correr antes de trabajar los dos meses que tuve el curso de inglés intensivo por las tardes. En definitiva, trabajando duro con un objetivo, con una ilusión, con una meta... con un fin que llegó cuando corrí el 5 de Noviembre de 2006 esa maratón. Fue la gran recompensa a todo el esfuerzo realizado durante tantos meses, una enseñanza impagable de cómo el sacrificio a veces te lleva a una inmensa y desmedida borrachera de felicidad. Para mí cruzar esa meta supuso una experiencia sin precedente, y supuso el principio de lo que hoy en día soy.
Amigo Paco, no voy con este mensaje a hablar de las ventajas para la salud que tiene practicar un deporte como este. Voy a centrarme en el aspecto mental y emocional. Me gustaría que entendieras que correr me aporta el chute de motivación que necesito cada día para levantarme. Me pone a prueba tanto física como mentalmente. Hace que busque en cada rincón de mí la superación de lo logrado hasta ahora. Me enseña que el trabajo duro y el sacrificio tiene recompensas. Me enseña a valorar el esfuerzo de otros que son peores atletas que yo y a admirar a aquellos a los que nunca alcanzaré. Me mantiene alejado por un momento del mundo real para poder esconderme en el mundo que diseño en mis mejores deseos, en mis mejores sueños, fuera de un día a día que no me gusta y que no consigo modelar para que me guste. Es mi vávula de escape hacia un poco de sosiego conmigo mismo, es el momento del día en el que más orgulloso me siento de mí mismo.
Amigo Paco, para mí es muy importante que entiendas todo esto. No necesito que te impliques en mi gran pasión, pero me gustaría poder compartirla contigo. Me gustaría que entendieras que es importante y que rechazándola me haces daño. Me gustaría que entendieras de una puta vez que es una parte fundamental de mi vida sin la cual no podría vivir. Supongo que tú tendrás otras razones y motivaciones que te empujan a salir cada día de la cama y a superar momentos adversos. Pues bien, yo, entre otras poquitas cosas, tengo mis carreras y necesito que mi mejor amigo, que eres tú, lo acepte. Al menos me gustaría...
Hoy voy a hacer una excepción y no voy a poner foto del viaje a Nueva York.
Me voy a la cama.
Quienes no corren no entienden por qué lo hacemos.
ResponderEliminarYo comparto todo lo que expones: no sólo se corre por motivos de salud, ni por adelgazar, ni por poder comer más. Se corre porque es una filosofía de vida.
Me ha parecido genial esta entrada y ya que tu amigo no lee tu blog, hazle llegar por correo lo que has escrito pues es lo más profundo que se puede expresar desde el corazón de un corredor.
Magnífica entrada.
Saludos.
Comprender por qué los demás hacen lo que hacen es a veces complicado. Pero en la amistad cabe la comprensión y seguro que tu amigo te comprende. Hazle llegar el post y seguro que le llega muy adentro, quien sabe tal vez lo veas en la próxima carrera animándote con toda su familia....
ResponderEliminarBuenas, te entiendo perfectamente.
ResponderEliminarEn Febrero del 2008 tuve una lesión importante, una rotura de peroné, la consecuencia de eso fueron 40 días parado completamente, otros tantos solo andando muy lentamente, en resumen, casi 80 días sin hacer ejercicio físico.
La segunda consecuencia de esto fue que me puse casi sin notarlo en 105 Kilos de peso. Cuando ya estuve recuperado y hablando con ciertos especialistas me recomendaron un gimnasio y mucho aeróbico.
Y eso hice, me apunté y el primer día me subí a la dichosa cinta de correr (cosa que odiaba anteriormente pero si podía ayudarme habría que probarlo). Pues bien, desde ese día ya no he parado de correr (no en modo profesional como vosotros) pero si salgo, doy mis carreras, poco a poco. El resultado de esto : 80 Kilos pasados 6 meses, aunque, como tu comentas, haya tenido que dejar fiestas de mis amigos, familia, pareja... un poco a un lado y sacrificarme para entrenar aunque ellos no lo entendieran. Ahora si no salgo un día me falta algo y me da un poco de ansiedad.
Ahora, 6 meses después estoy planteándome hacer la San Silvestre.
Por último, dame algunas recomendaciones a ver si mejoro mi capacidad física y mi rendimiento.
Suerte y sigue así maestro.
Te entiendo, es dificil que la gente que no corra, entiendan por que lo hacemos.
ResponderEliminarYo tengo suerte, ya que mis amigos han corrido alguna vez, o corren, o vienen del Futbol.
Y los que a veces me atacan, en el fondo ellos admiten que es por envidia, porke a ellos les gustaria hacer algo, pero son vagos.
FELIZ NAVIDAD
Muy buena carta si señor. A mi mejor amigo le pasa lo mismo, pero lo tengo convencido para que venga de apoyo al Challenge de Calella, seguro que allí comprenderá por que lo hago.
ResponderEliminarSaludos.
Hay mucho de mi en tu "Carta abierta", lo describes tan bien que me sería muy difícil superar tus palabras. Así que esta es una de las mejores entradas que he leído de los muchos blogses que leo. Un abrazo
ResponderEliminarGregorio, aparte de expresar con esta entrada todo lo que me gustaría que Paco Dimas entendiese, también quería pensar en voz alta todas las sensaciones y motivaciones que me incitan a correr. Por eso también me alegro que te haya gustado, porque me ha salido del alma.
ResponderEliminarRafa, va a seguir siendo mi mejor amigo lo entienda o no, pero es cierto que me encantaría que esto lo entendiera mejor de lo que lo hace.
Sarebok, en primer lugar bienvenido al blog. En segundo lugar darte mucho ánimo para la San Silvestre, es una buena idea y esas carreras siempre hay mucho ambiente y diversión. En cuanto a los consejos... es complicado. Supongo que por el tiempo que llevas te recomendaría que te hicieras con un plan de entrenamiento para 10 Km de iniciación o directamente buscaras un entrenador que te ayude a mejorar y a hacer las cosas con cabeza para no lesionarte.
Schuster, la verdad es que para muchos somos locos, pero a mí me queda intentar que los que me rodean entiendan que detrás de esa locura hay un bienestar y una recomepensa para mí.
Francisco, espero que consigas que lo comprenda, jaja. Si no pues seguiremos teniendo que discutir y renegar de sus comentarios.
Salud !!
Paco Montoro, tus palabras me llenan de satisfacción. Me alegro que te haya gustado.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias por compartir todo esto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Kal, de nada. Un abrazo muy grande.
ResponderEliminarsomos unos incomprendidos!!!!!Felicidades compañero. la Operacion Alemeria esta en marcha....
ResponderEliminarCarlitros, con tu permiso, copiaré literalmente la carta, excepto el nombre de tu amigo, y se la enviaré a Serafín y a Ventura, dos amigos que tampoco me entienden.
ResponderEliminarUn abrazo, y feliz Navidad...
Enhorabuena por este puñado de palabras que suscrio de pe a pa y que pienso usar para "convencer" a algunos amigos de que sí. De que estamos zumbados... o que quizá los zumbados sean ellos.
ResponderEliminarFeliz navidad.
Es bonito soñar y ver los sueños cumplidos, aunque en esto del correr no siempre nos entienden. Has expresado de una manera clara lo que te lleva a seguir corriendo, si tienes suerte y tu amigo lee la entrada quizas su opinion cambie.
ResponderEliminarFelices fiestas.
Hola he llegado a tu blog desde otros blog y he leído tu entrada , me ha parecido muy emocionante y muy bonita , es como una carta de amor a tu amigo y al running . Saludos y felices fiestas .
ResponderEliminarBuenos días
ResponderEliminarA veces es complicado Carlitros y consideran que ese tiempo que para él es que lo pierdes con entrenos, carreras, no yendo de borracheras, podrías estar con ellos...
También tengo amigos así... Claro, todos tenemos pasado y a veces el cambiar pautas de conducta, no es que no lo acepten, sólo que preferirían que no lo hicieras.
Bueno, que me enrollo
Me ha gustado mucho tu entrada y que la compartieras
FELICES FIESTAS
Dicen que el que algo quiere algo le cuesta. Bss
ResponderEliminarEste deporte es minoritario y por tanto no es mucha la gente que comprende que para disfrutarlo plenamente ,cuanto mas en forma estemos es mejor y solo se consigue estar en forma entrenando con cierta regularidad;eso no lo entiende la gente a la que no le gusta nuestro deporte y tampoco comprende que quitemos tiempo a los amigos,mujer y con quien quiera que sea la persona que vive nuestro dia a dia de forma cercana.Yo por suerte tengo a mi mujer que lo entiende,pero se de sobra que muchas de las veces que salgo a entrenar ella preferiria que no lo hiciera para dedicarle mas tiempo a ella,veo que a ti te pasa eso con tu amigo y la verdad es que no tiene mucha solucion te pide algo que no le puedes dar,asi que sigue intentando hacerle entender que esto es lo que mas te gusta en el mundo y que se anime a acompañarte a carreras o correr por ejemplo la san silvestre de Madrid a la que se apunta mucha gente que no corre habitualmente.Lo unico que esta claro es que te tendra que aceptar con tu deporte,porque eso forma parte tambien de ti y te hace feliz como estar con tu amigo,ni mas ni menos,cada cosa debe tener su momento y no nos podemos multiplicar.
ResponderEliminarUn saludo y mucho animo,espero que algun dia tu amigo se anime a practicar de vez en cuando este gran deporte y asi te vaya entendiendo poco a poco,ademas de poder compartir contigo mas tiempo del que teneis.
Tu amigo seguro que lo comprende , porque a todos nos pasa que ternemos amigos que nos dicen que estamos chalaos , pero en su corazon se alegran que seamos felices, un saludo
ResponderEliminarPara todos, tendremos que seguir luchando porque nos acepten con nuestra "loca" afición y nuestras salidas a horas y condiciones intempestivas. Yo seguiré intentándolo cada día.
ResponderEliminarUn abrazo