Esta mañana tenía un entreno de los cañeros, tal vez el entreno de calidad más exigente de toda la preparación. Tenía que hacer un rodaje de calentamiento de 25 minutos y enlazarlo sin parar con un 3x5000 recuperando una vuelta al trote entre cada serie. Tras el tercer 5000, también sin parar, 10 minutos de rodaje suave para recuperar y enfriar. Ayer calculé que me llevaría más o menos 1h40 el entreno y no me equivocaba.
Pero por lo que he decidido escribir este post tras el entreno es porque quiero recordar a todos lo importante que es la mente en los momentos difíciles, tanto al entrenar como por supuesto en carrera.
David me dijo que tenía que hacer la primera serie a 4’15”, la segunda a 4’10” y la tercera a 4’00”. Hace un par de semanas hice un entreno exactamente igual con cuatromiles y recuerdo que el último me costó bastante, así que ya sabía que hoy me iba a pasar lo mismo. Además esta mañana hacía muchísimo aire que daba de cara en la contra-recta y a favor por tanto en la recta de meta, pero que dificulta siempre la realización de este tipo de entrenos.
Pues nada, a las diez y cuarto me he puesto a correr, he rodado los 25 minutos, he hecho la primera serie en la que he ido bien (21’13”), vuelta al trote (2’06”), la segunda en la que también me he encontrado bien aunque he sufrido un poco más que en la primera (20’49”), otra vuelta al trote (2’11”) y a por el tercer cincomil.
Iba ya muy cansado, llevaba en las piernas casi 16 kilómetros pero tenía que afrontar que lo siguiente eran otros cinco más a ritmo de 4’00” por kilómetro (esto es a 1’36” por vuelta). La primera vuelta la he dado muy rápido (1’32”) supongo que impulsado por el pequeño relax de la vuelta al trote y por la inseguridad que tenía en mis fuerzas que me llevaba a empezar rápido para tener un pequeño margen. He pasado el primer mil en 3’55”. A partir de ahí me he empezado a venir un poco abajo. A pesar de eso he pasado por el segundo kilómetro en 7’56”. El siguiente ha sido más duro, ya he llegado bastante cascado y he empezado a tener la sensación de no poder terminar el entreno, e incluso he llegado a tener el convencimiento de que no podría hacer los cinco kilómetros en 20 minutos. Aún así he pasado el tercer kilómetro en 11’57” con tres segunditos de margen. Pero iba vacío de fuerzas y se me estaba haciendo eterno el final del entrenamiento. Ahí he decidido en lugar de restar kilómetros en mi cabeza (me quedaban 2) restar vueltas (me quedaban 5), pero aún así se me estaba haciendo muy cuesta arriba. He pasado el kilómetro 4 en 15’59”. Y este ha sido el momento de la mente. Mis piernas no querían seguir corriendo. El aire en contra cada vez que encaraba la contra-recta me estaba vaciando la moral. Las pulsaciones estaban por las nubes, la respiración no fluía como debe. Todo me indicaba que iba a tener que bajar el ritmo para terminar la serie, todo, salvo la mente, que me estaba diciendo que tenía que acabar en 20 minutos justos. Me he convencido a mí mismo de que iba a mantener el ritmo para terminarla en condiciones. He pasado con un tiempo de 18’26” a falta de una vuelta, es decir, que para acabar el entreno en el objetivo tenía que hacer el último 400 en 1’34”. A pesar de las piernas, las pulsaciones, el aire y la respiración he corrido esa última vuelta en 1’32” para completar los cinco kilómetros en 19’58”. Han sido la mente y la concentración las que me ha permitido cumplir con el plan marcado.
Yo soy de los que piensa que en las carreras en general, pero sobretodo en las de fondo, el poder de la mente es importantísimo. Y soy también de los que piensan que la capacidad de sufrimiento y la de la propia mente se puede y se debe entrenar. Yo esta mañana podría haberme conformado con simplemente terminar la serie y sin embargo he sacado un plus de donde no lo había para hacerla en el tiempo marcado en el plan, y creo que esa actitud entrenando se traslada después a las carreras permitiéndome sacar el máximo en ellas y mejorar unos segunditos mis marcas. Por eso me ha gustado mucho el entreno de esta mañana a pesar de lo mal que lo he pasado.
Por cierto, al terminar ese 5000, y sin parar, he trotado suave 10 minutitos para bajar las pulsaciones y dar por acabado el entrenamiento. Al final he corrido un total de 22,27 Km en 1h40’25”.
Salud !!
Pero por lo que he decidido escribir este post tras el entreno es porque quiero recordar a todos lo importante que es la mente en los momentos difíciles, tanto al entrenar como por supuesto en carrera.
David me dijo que tenía que hacer la primera serie a 4’15”, la segunda a 4’10” y la tercera a 4’00”. Hace un par de semanas hice un entreno exactamente igual con cuatromiles y recuerdo que el último me costó bastante, así que ya sabía que hoy me iba a pasar lo mismo. Además esta mañana hacía muchísimo aire que daba de cara en la contra-recta y a favor por tanto en la recta de meta, pero que dificulta siempre la realización de este tipo de entrenos.
Pues nada, a las diez y cuarto me he puesto a correr, he rodado los 25 minutos, he hecho la primera serie en la que he ido bien (21’13”), vuelta al trote (2’06”), la segunda en la que también me he encontrado bien aunque he sufrido un poco más que en la primera (20’49”), otra vuelta al trote (2’11”) y a por el tercer cincomil.
Iba ya muy cansado, llevaba en las piernas casi 16 kilómetros pero tenía que afrontar que lo siguiente eran otros cinco más a ritmo de 4’00” por kilómetro (esto es a 1’36” por vuelta). La primera vuelta la he dado muy rápido (1’32”) supongo que impulsado por el pequeño relax de la vuelta al trote y por la inseguridad que tenía en mis fuerzas que me llevaba a empezar rápido para tener un pequeño margen. He pasado el primer mil en 3’55”. A partir de ahí me he empezado a venir un poco abajo. A pesar de eso he pasado por el segundo kilómetro en 7’56”. El siguiente ha sido más duro, ya he llegado bastante cascado y he empezado a tener la sensación de no poder terminar el entreno, e incluso he llegado a tener el convencimiento de que no podría hacer los cinco kilómetros en 20 minutos. Aún así he pasado el tercer kilómetro en 11’57” con tres segunditos de margen. Pero iba vacío de fuerzas y se me estaba haciendo eterno el final del entrenamiento. Ahí he decidido en lugar de restar kilómetros en mi cabeza (me quedaban 2) restar vueltas (me quedaban 5), pero aún así se me estaba haciendo muy cuesta arriba. He pasado el kilómetro 4 en 15’59”. Y este ha sido el momento de la mente. Mis piernas no querían seguir corriendo. El aire en contra cada vez que encaraba la contra-recta me estaba vaciando la moral. Las pulsaciones estaban por las nubes, la respiración no fluía como debe. Todo me indicaba que iba a tener que bajar el ritmo para terminar la serie, todo, salvo la mente, que me estaba diciendo que tenía que acabar en 20 minutos justos. Me he convencido a mí mismo de que iba a mantener el ritmo para terminarla en condiciones. He pasado con un tiempo de 18’26” a falta de una vuelta, es decir, que para acabar el entreno en el objetivo tenía que hacer el último 400 en 1’34”. A pesar de las piernas, las pulsaciones, el aire y la respiración he corrido esa última vuelta en 1’32” para completar los cinco kilómetros en 19’58”. Han sido la mente y la concentración las que me ha permitido cumplir con el plan marcado.
Yo soy de los que piensa que en las carreras en general, pero sobretodo en las de fondo, el poder de la mente es importantísimo. Y soy también de los que piensan que la capacidad de sufrimiento y la de la propia mente se puede y se debe entrenar. Yo esta mañana podría haberme conformado con simplemente terminar la serie y sin embargo he sacado un plus de donde no lo había para hacerla en el tiempo marcado en el plan, y creo que esa actitud entrenando se traslada después a las carreras permitiéndome sacar el máximo en ellas y mejorar unos segunditos mis marcas. Por eso me ha gustado mucho el entreno de esta mañana a pesar de lo mal que lo he pasado.
Por cierto, al terminar ese 5000, y sin parar, he trotado suave 10 minutitos para bajar las pulsaciones y dar por acabado el entrenamiento. Al final he corrido un total de 22,27 Km en 1h40’25”.
Salud !!
Tienes toda la razón. Gebrselassie dice : "el cuerpo no importa, lo importante es la mente". Este post me viene de maravilla. Dices: "la capacidad de sufrimiento y la de la propia mente se puede y se debe entrenar". Tomo nota. Y del entreno sólo puedo decir: espectacular!!. Como siempre aprendiendo, aprendiendo.... Tanks!
ResponderEliminarBuff, parece que estubieras narrando una carrera. Que bueno ese punto de locura y fuerza mental que nos lleva a llegar a donde el cuerpo no nos dejaría.
ResponderEliminarPromete mucho tu proxima carrera. Ese Mapoma será de los que harán historia.
Un saludo.
Carlitros, fundamental, el mental es tan importante como el físico, y la capacidad de sufrimiento también se ha de entrenar para que luego en carrera no nos acongogemos más de la cuenta.
ResponderEliminarBuenos entrenos, ánimo, que ya se ve Madrid muy cerca. Un abrazo.
Muy buena esa fuerza mental. Tienes toda la razón en que es importantísima en las carreras de fondo. Felicidades por esos entrenos.
ResponderEliminarHola Carlitos, soy nuevo por aquí y me ha encantado tu blog.
ResponderEliminarLa mente es básica, yo suelo pensar cuantos kilómetros me quedarán después de hacer un kilómetro más (me como uno), jaja!
Un saludo!
Estupendo post, de los mejores amigo. Me motivan para días de flaqueza. Un abrazo
ResponderEliminarMuy buena entrada Carlos . Totalmente de acuerdo . Los limites del ser humano nos los marcamos nosotros mismos . Un saludo .
ResponderEliminarCarlos que duro eres!!!!en serio estos entrenos son los que te refuerzan ! a darle caña hasta mapoma!!!
ResponderEliminarLo has bordado Carlos, tanto en el entreno como en la entrada. Te doy toda la razón, tanto en el deporte como en la vida en general la clave no está en lo bueno que seas o las cualidades que tengas sino en la MENTE, ésta nos puede dar grandes beneficios y hacernos grandes....pues eso, ahí queda tu gran entrada, un saludo.
ResponderEliminarEstá claro que la cabeza hace mucho, por ahí se dice que el 75% es fuerza mental.
ResponderEliminarSe nota que de eso vas bien, muy importante para el maratón.
Ánimo Campeón ya va quedando menos.
¿Sabes que este fue uno de los primeros consejos que me dio mi padre? Desde que empecé a correr lo tengo clarísimo: tan importante o más es la mente y conseguir una gran capacidad de concentración y seguridad en uno mismo. La suficiente para que te lleve en volandas cuando el cuerpo ya no pueda más. En el km 20 de la Media de León llegó mi límite de fuerzas (quedaba tan poco!!), pero fue mi cabeza y sobre todo mi corazón los que me empujaron en ese último esfuerzo. Cuerpo y mente. Pero no te olvides del corazón. Es el que tira cuando los otros ya no pueden.
ResponderEliminarUn beso Medio Vecino!
Rafa:
ResponderEliminarHombre sabio y buen corredor Gebre... me alegro que mis experiencias te ayuden un poquito.
Joan:
Desde luego no sé si lo haré bien o no, pero lo estoy entrenando con ilusión y disciplina que siempre es importante.
Fran:
Desde luego que la mente juega un papel fundamental. Espero que sea mi aliada en los últimos kilómetros del Mapoma.
David:
Gracias por tus palabras. Supongo que para todo la mente es importante, pero pienso que en las carreras de fondo especialmente.
Jules:
Bienvenido al blog. La verdad es que cada uno tenemos nuestras técnicas para suavizar el esfuerzo. Yo tengo las mías también, jeje.
Paco:
Un placer tus palabras. Espero que te ayude a superar esos días malos.
Juanito:
Me alegro que te haya gustado. Yo pienso que gran parte de las limitaciones que nos ponemos son mentales. Por eso a veces es importante entrenar la mente tanto como el cuerpo.
Francisco:
Espero que la mente me funcione bien ese día, sería una buena señal. Espero al menos que así sea.
Sonia:
Tu padre es un hombre sabio si te dijo eso... La mente y como dices el corazón son los que a veces nos empujan cuando pensamos que no hay más que dar.
Salud !!
El poder de la mente es increible como dices... Yo casi siempre suelo ir roto ya hacia la mitad de las carreras y sin embargo no sé de donde saco la famosa "sexta marcha" esa que tenemos todos y aguanto sin bajar el ritmo casi del 15 al 21. El jueves me tocan a mi esas series largas....¡¡¡¡Que poco nos queda para Mapoma!!! Y yo sin los deberes hechos de kilometrajes y demás.... Pero con más animo que nunca, no para una marca determinada sino para lograr acabar otro más, que en maraton de eso se trata. He visto a todos los grandes caerles los minutos en muchísimas maratones: Julio Rey, Chema, Rios... asi que ya me he quitado la puñetera presión de la marca en una carrera tan llena de incertidumbre como es un maratón y más en el anarquico circuito madrileño con 600 metros de subidas y casi los mismos de bajadas cascacuadriceps. Asi que Carlitros, si llegamos a meta ya habremos ganado... ¿la marca? pues la que salga según las circustancias... Animo...¡16 dias ya! Un abrazo
ResponderEliminarPd.- Estoy usando el "running ahead" para medirme circuitos pero no sé cuando le doy a "save" dónde leches se guardan ni como recuperarlos... Tampoco sé si puedo guardar los graficos de altimetria como jpgs... ¿alquien me puede echar una mano? Gracias
Buenos días (y fresquitos también jejeje)
ResponderEliminarPedazo de entreno, objetivo cumnplido y la mente intacta. Gran reflexión y la mente permite obtener el 100% de uno.
Me alegro de que vaya todo por buen camino!!!
venga, que no queda nada ya para swer sub 3 jejeje no hay nada como meter un poco de presióon jajaja
Saludos
Barney:
ResponderEliminarSeguro que haces un carrerón, ya verás. En cuanto a los circuitos del Running Ahead, creo que al guardarlos lo que ocurre es que los pones a disposición de todo el mundo, y para encontrarlos de nuevo basta con que los busques por el nombre, ubicación o lo que sea. De todas formas aunque yo usé mucho tiempo el runningahead.com para guardar mis entrenos, nunca metí circuitos, así que igual alguien te puede ayudar mejor que yo.
Javi:
No hay presión, jeje. Intentaré hacer la mejor carrera posible y si eso significa bajar de 3 horas, pues mejor.
Salud !!